Es común que los niños al ir desarrollando su lenguaje presenten algunas dificultades de pronunciación, en ocaciones esto se nos hace tierno o divertido ya que son pequeños, pero el no corregir una mala pronunciación puede llegar a causar un problema de lenguaje más adelante. (lee aquí sobre las etapas de desarrollo del lenguaje)
En la producción del habla intervienen muchos órganos de nuestro cuerpo a los que se les llama órganos fono articulatorios. Cada uno de estos juega un papel importante al momento de coordinar movimientos para intentar producir un fonema (sonido) adecuado.
Algunos de estos órganos que intervienen en el habla son la mandíbula, las mejillas, los labios, el paladar, faringe, laringe y la lengua. Para crear sonidos con el apoyo de estos órganos intervienen también la fuerza, el control, la estabilidad, disociación y precisión de movimientos.
Con estos ejercicios que se proponen en seguida se reforzarán algunos de estos aspectos de forma divertida.
*Refuerza la mandíbula.
¡Mastica! Puedes masticar chicle o alimentos duros de masticar, recuerda no entregarle todos los alimentos en trozos pequeños deberán ser como como una manzana completa o verdura cruda, zanahoria, apio, elote en mazorca; hasta alimentos difíciles de mascar como la carne.
*Mueve los labios.
Al soplar burbujas lo que se logra es expulsar aire a través de los labios redondeados así como cuando decimos las vocales O U. Si no aparece la redondez al momento de soplar intenta utilizando popotes. Yo te recomiendo este soplador de pelotitas para los peques, ¡les encanta y además tendrán horas de diversión estimulando fuerza y control! (Ver aquí Soplador para niños)
*Estimula el velo del paladar y la garganta.
Elijan su bebida favorita y jueguen a hacer gárgaras, deben elevar la mirada al techo y mover el liquido sacando aire por su garganta. Para hacerlo más divertido pueden intentar cantar canciones o hacer sonidos mientras gargarean. Es de lo más entretenido solo mentalízate que al final tal vez habrá que limpiar o cambiarse de ropa pero vale la pena el intento.
*Refuerza lengua y estimula paladar.
Esta actividad les encanta a los niños porque es dulce y pegajosa. Puedes utilizar recortes, una oblea u hostia (depende de cómo le llamen en cada lugar) o algún dulce que sea pegajoso. Deberán colocarlo en el paladar y tratar de retirarlo solo con la lengua. Pueden intentarlo las veces que quieran y después tratar de hacerlo pero sin cerrar la boca.
Checa el siguiente video para más ejercicios de gimnasia articulatoria
Ojo. Estos ejercicios estimulan y refuerzan los órganos fonoarticulatorios más no son la solución completa a un problema de lenguaje, si observas que tu niño presenta mucha dificultad para hablar es necesario acudir a un experto en terapia de lenguaje.
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