Para un niño de 3 o 4 años lograr escribir su nombre es un gran éxito, y para lograrlo se pueden realizar diversas actividades ya sea para iniciar el reconocimiento de las letras, su sonido o para el trazo de estas.
En seguida podrás encontrar 5 actividades divertidas para empezar a reforzar estas habilidades.Utiliza sus sentidos. Realizar trazos con el dedo sobre diferentes texturas envía al cerebro señales mucho mas fuertes, haciendo que los trazos se queden grabados con mayor facilidad. Puedes intentar hacerlo sobre papel de lija, arena, espuma o lo que se te ocurra que pueda ser divertido y estimulante como la gelatina que aparte de mandar estímulos táctiles envía olor y ¡sabor! (Ve aquí la arena sensorial)
Rompecabezas de letras. traza su nombre en una cartulina y luego recorta cada letra por separado, será divertido ver en cuanto tiempo logra acomodarlo correctamente; después podrán ir agregando las letras de su apellido y hacerlo un reto aún más complicado.
Empieza con la letra... Busquen objetos que comiencen por las diferentes letras de su nombre y únanlos para crear una fila de objetos de acuerdo a la ubicación de cada letra de su nombre. Por ejemplo: HECTOR: un hilo, una esponja, una camisa, una taza, un oso y una rama. Pueden hacer los nombres de toda la familia y divertirse por horas. (Ver aquí: ejercicios de conciencia fonológica)
Sopa de letras. Es aquí el momento de hacer la hora de comer divertida, elijan un día para preparar sopa de letras, antes de hacerla con ayuda el pequeño podrá recolectar las letras de su nombre para poder manipularlas y acomodarlas en el orden correcto; al servir la sopa en cada cucharada podrá ir identificando si ha tomado alguna letra de su nombre con la cuchara, puede decir su sonido, en que espacio va o separarla para volver a formar su nombre.
Ese es mi nombre. Esta actividad es para los más pequeños o que apenas comienza a desarrollar su lenguaje. Se deberá hacer varias veces en una hoja el nombre del niño en un tamaño visible para él, y se irá pegando su nombre en las cosas que el utiliza o son suyas, por ejemplo: su silla en el comedor, la puerta de su cuarto, su cama, su caja de juguetes, su asiento del coche, etc. Cada que el niño utilice uno de esos objetos o espacios podrá señalarse su nombre y repetirlo: Aquí se sienta Toño. Aquí se duerme Toño, esta caja de juguetes es de Toño. Poco a poco irá grabando la forma y sonido de su nombre en su memoria para después producirlo por él mismo.
¡Diviértanse practicando cada una de ellas y aprendan jugando!
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